si nuestro refugio es la noche
y la luna nuestra almohada
seguro que las estrellas al vernos
suspiran enamoradas

en cada latido que escucho
mi corazón me reclama
en cada instante tus besos
como en un fuego que aclama

como un ladrón en silencio
voy a robarte tu alma
y en cada abrazo yo siento
que se rebela tu calma

abre la flor caprichosa
que desnuda tu conciencia
pues yo voy a volverte loca
con mi atrevida experiencia

en un susurro entre versos
quiero que sientas mi anhelo
entrelazando las manos
te llevare hacia mi cielo

que hablen los sentimientos
que el desconsuelo enmudezca
que se derrita ese hielo
que a la pasión siempre aleja

pues somos hijos del fuego
que nos recorre las venas
yo bordare en un pañuelo
tu nombre que me serena

y allá donde se escuche te quiero
seguro que nos encuentran
tu y yo, con labios sellados
esperando a que amanezca

mirando tus ojos de niña mimada

moriremos poco a poco con el rayo de la mañana

besaremos los momentos de la oscura hora robada

que sepa el día y la noche que ardes en mi venganza

porque tu mi princesa diamantina eres dueña del alba,
YEXHUA: