LA MUSA REAL:
Encerrado dentro de su fuego central, se esconde la perfección y la vida,
La ciencia de la vista, domina desde sus altas cimas lo absoluto,
Lanza sucesivamente su mandato, AY el alma esta por encima de la ciencia,
Por ella la historia se ha acumulado sobre el mundo,
Por ella todas las miradas de astros giran a través del espacio,
Siguiendo en espiral la ruta con largas desviaciones que fluyen en lo permanente,
Lo real por ella tiende a lo ideal,
Por ella la evolución cósmica justifica lo que llamo el gozo en astucia real,
Aletean sus pétalos y tersa su rosa cuanto proporciona,
Áurea torrencialmente el placer flexible,
La música que brota en la circunvolución de su galaxia,
La germinación y el agua ciega. En la liturgia del pensamiento liquido
Desnuda lo original,
El fuego de las noches sagradas, el fruto que se cierra en la turquesa para entrar a sudar en esa violenta felicidad,
Con su luna crepita de abrasas que ardían el fuego mas allá del sudario fresco,
AY...Me rodea su lasciva boca y mil veces me besa,
Cuando a mi ardiente boca su dulce labio aprieta,
Adhiriéndose a mi cuerpo sobre la maleza el dolor libre revolotea eternamente en el aire puro y feliz,
La nube mas lóbrega de la perfección, vuela siempre perfecta como un resplandor de gloria, el cielo en medio de la disonancia el loco estrépito babilónica, de las orgías ensordecedoras,
Se oye una melodía que arrulla en los silencios, lejanas resume el coro final, mis benditos ojos que conocen el hilo sutil que conduce a través del inmenso laberinto,
La culminación que muestra su bendita naturaleza, que abre el edén de flores y frutas que permiten cantar el pensamiento, Ay sus mejillas rosas un clavel en el ala placida del sueño reposa, el amor nace y en gozar se place al viento tornando su ruego cargado de fuego,
Mi deseo es interior ya nada me limita, la excedo a contenerme dentro de sus limites, aunque es mi engranaje que la anima,
El vicio del lenguaje que insiste en lo más obvio del hondo firmamento,
En el símbolo de las crónicas, YEXHUE: quiero poseer tu morada
con el rapto de la brisa vestida de gala en carmesí,